Ud está aquí:
  1. Presentación
  2. PCI CC.AA.
  3. La Rioja
  4. Patrimonio Cultural de los Disciplinantes de San Vicente de Sonsierra

Volver

Patrimonio Cultural de los Disciplinantes de San Vicente de Sonsierra

DENOMINACIÓN: PATRIMONIO CULTURAL DE LOS DISCIPLINANTES DE SAN VICENTE DE SONSIERRA. Salto de línea Salto de línea LOCALIZACIÓN: La Rioja.

Aunque no nos consta el momento de la fundación de la Cofradía de la Santa Veracruz, es evidente su existencia desde antiguo. Por el importante archivo de la Cofradía, sabemos que en 1551 se presentaron los estatutos y ordenanzas ante el Vicario General del obispado para su aprobación, pero lo presentado es una recopilación sobre lo que se practicaba de forma habitual, solo se intentaba poner en orden y reorganizar la institución para vivir con plena exigencia la 'Santa Regla'.

En la actualidad la Cofradía sigue manteniendo el respeto a la Santa Regla y, a pesar del paso del tiempo, de las dificultades y de las sucesivas prohibiciones, con el mismo sentido y autenticidad.

Sin duda alguna los Disciplinantes de San Vicente de la Sonsierra más conocidos como 'Picaos' ostentan un lugar relevante en la religiosidad popular y en las tradiciones, no sólo de nuestro pueblo, sino de toda La Rioja e incluso de toda España, porque actualmente no existe otro lugar donde se halla podido mantener este rito secular.

Ésta es la última y única manifestación del rito penitencial de la flagelación que queda en España, donde hasta el siglo XVIII era una práctica relativamente frecuente en pueblos y ciudades.

El motivo por el que en un pueblo de las características de San Vicente de la Sonsierra se ha podido mantener una tradición como esta a lo largo de los siglos es difícil de precisar de forma inequívoca. Probablemente no existe una única explicación, sino una serie de razones de índole histórica, cultural, religiosa y tradicional que han conseguido fijar en la memoria colectiva de los sucesivos habitantes de la localidad, que formaron parte de esta Cofradía o que se disciplinaron sin pertenecer a ella, un sentimiento de cariño y respeto a esta tradición.

El paso del tiempo, las guerras o prohibiciones no han podido con el deseo de este pueblo por continuar con este rito insólito debiendo, en algunos momentos de la historia, recurrir a la clandestinidad.

Quien desee disciplinarse debe cumplir una serie de requisitos: ser varón, mayor de edad y, si no pertenece a la Cofradía, disponer de un certificado de su párroco en el que conste que que no se ponen objeciones para que pueda disciplinarse.

Una vez cumplidos los requisitos, el disciplinante acudirá a la ermita de San Juan de la Cerca, sede de la Cofradía, donde se le asignará un acompañante o padrino, hermano de la Cofradía, que le servirá de guía, ayuda, apoyo y consejo durante el tiempo de su penitencia.

Ya vestido con el hábito, acudirá a la procesión o a la Hora Santa, se arrodillará ante el paso al que haya hecho la ofrenda o ante el monumento en la iglesia, rezará una pequeña oración y al ponerse en pie, el acompañante le retirará la capa de los hombros y le abrirá la abertura de la espalda.

El Disciplinante cogerá la disciplina con las dos manos y balanceándola entre las piernas, se golpeará la espalda por encima del hombro alternativamente a izquierda y derecha durante un tiempo variable según cada disciplinante, pero que suele ser de unos 20 minutos en los que se autoasestará entre 600 y 1.000 golpes, hasta que el acompañante y el práctico decidan cuándo es el momento de ser pinchado,

Llegado este momento, se inclinará y colocará la cabeza entre las piernas del práctico, que golpeará levemente la espalda tres veces cada lado de la zona lumbar, para que brote un poquito de sangre y para evitar molestias posteriores, pero nunca para mortificar más o aumentar el sufrimiento. Después, se golpeará 15 o 20 veces más.

El utensilio que tradicionalmente se utiliza para picar se denomina 'esponja' y consiste en una bola de cera virgen con 6 cristales incrustados de dos en dos, de manera que cada disciplinante recibirá 12 pinchazos.

Finalizada la penitencia, disciplinante y acompañante volverán a la sede donde el practicante le lavará y curará con meticulosidad las pequeñas heridas con agua de romero.

Los días en los que se celebran actos con Disciplinantes son:

- Jueves Santo. Durante la procesión de la Última Cena y durante la Hora Santa.

- Viernes Santo. Durante el Vía Crucis y la procesión del Santo Entierro.

- Cruz de Mayo (3 de mayo si es domingo y si no el domingo siguiente). Durante el Vía Crucis.

- Cruz de Septiembre (14 de septiembre si es domingo y si no el domingo siguiente). Durante el Vía Crucis.

Las mujeres, que en el siglo XVI, pertenecían a la Cofradía y luego desaparecieron como hermanas de la misma, vuelven a poder pertenecer a esta hermandad desde 1998. Su penitencia se limitará a la tradicionalmente ejercida por ellas como 'Marías'.

Los disciplinantes San Vicente de la Sonsierra
Los disciplinantes San Vicente de la Sonsierra

LEGISLACIÓN Y RECURSOS

Línea horizontal
  • Decreto 36/2016, de 16 de septiembre, por el que se declara Bien de Interés Cultural de carácter inmaterial "El patrimonio cultural de los Disciplinantes de San Vicente de la Sonsierra (La Rioja)" Nueva ventana
  • Comunidades portadoras:

- Actualmente la Cofradía está formada por unos 160 hermanos, mayoritariamente de San Vicente de la Sonsierra pero buena parte de la población ha pertenecido en algún momento a ella y muchos de los varones y mujeres se han disciplinado o se han vestido de 'Marías' en alguna ocasión.

La asistencia a los Misereres, tradicionalmente ha sido masiva, no sólo por parte de los cofrades que tienen sus obligaciones como hermanos, sino también por parte de los fieles de la parroquia.

Pero sin duda alguna donde la Cofradía recibe el apoyo de los vecinos de nuestro pueblo es durante los actos programados durante la Semana Santa. La repercusión mediática de las famosas procesiones de los disciplinantes hace que durante estos días miles de personas acudan a la localidad.

FONDOS BIBLIOGRÁFICOS

Línea horizontal
Subir